cap. 7 EL SILENCIO, EL PEOR CASTIGO
En la Familia 1 como ya hemos dicho, se había declarado una guerra de dos hijos contra su madre. La familia Barrios Bravo se estaba desmoronando y después de caer el primer pilar, dos trataban de derrumbar el que quedaba para terminar destruyendo lo que se había construído a lo largo de 45 años.
La primera acción de Circe, llamada así como la hechicera, hija del dios Helios y de la nereida Perseis de la que supe en La Odiesea de Homero y Tántalo cuyo nombre también coincide con un personaje mitológico de la misma obra y que traicionó a los dioses, fue cortar comunicación con su madre Piedad. Después de las fiestas navideñas y de una despedida fría, llegó el 2 de enero y no volvieron a contestar las llamadas, decidieron demostrarle a su madre que estaban decididos a no hablar con ella si no cedía a sus deseos, que por cierto, no habían sido manifestados porque aun no se conocía lo que decía el testamento. Pasó el primer mes de aquel año y apenas 3 meses de la muerte de Benigno su padre y no hubo noticias de ellos hasta la primera reunión con el notario para la lectura de la últma voluntad del patriarca.
Circe y Tántalo llegaron acompañados de un abogado y lo primero que hicieron fue aclarar que él hablaría por ellos para cualquier asunto relacionado con "la señora", así se refirieron a Piedad y eso le acabó de romper el corazón. El notario leyó el documento y la primera respuesta de los dos hijos ingratos vía su abogado que ya llevaba la respuesta preparada, fue que no estaban de acuerdo y pelearían por lo que según ellos les correspondía. Los otros 4 hermanos y Piedad se miraron extrañados, pues ignoraban que hubiera una voluntad diferente a la que se había expuesto y firmado por Benigno. El mismo notario que conocía la familia de toda la vida, se sorprendió de la reacción y advirtió a la viuda que tuviera cuidado, a pesar de que el testamento claramente decía que Piedad tenía derecho de disfrutar todos los bienes hasta el día de su muerte y sus hijos heredarían en partes iguales todo, solo hasta que ella no estuviera. Seguramente Benigno pensó que era la mejor forma de proteger a su esposa de cualquier trámite legal y pago de impuestos; dejaba a sus 6 hijos como herederos y confió en que serían fieles guardianes del bienestar de Piedad, su madre. Benigno se equivocó, se fue sin saber el grave error que había cometido.
En la familia (2) Invadidos las cosas no iban tan mal, pero no iban bien, después de las imposiciones de Aparición comenzaron los roces, Lucha no estaba dispuesta a aceptar las reglas de compartir todo y ser supervisada, por lo que decidió hablar con Ángel para pedirle que hiciera algo. A Ángel le resultaba muy cómodo relajarse y compartir las decisiones con Aparición, habían sido muchos años sacando a sus hijos adelante él solo, así que en lugar de hablar las cosas con Aparición, le pidió a Lucha que tuviera paciencia y le aseguró que pronto las cosas tomarían mejor forma.
Justo y Pacífico también hijos de Ángel, escucharon las quejas de Lucha pacientemente y Justo le dio la razón en la mayoría de las cosas, pero no aportaron mucho en la solución. Lucha decidió actuar sola y de acuerdo a lo que le dictaba su buena y juiciosa conciencia. Compró un mueble que requería llaves para ser abierto y guardó ahí lo que no quería compartir y dejó de hablar con Aparición, solo cruzaba palabra con ella para lo indispensable. Aparición por su parte, comenzó a cambiar su forma de vestir, ahora usaba ropa más cara aunque no por eso de mejor gusto, decidió además las próximas vacaciones de la familia y una serie de reuniones en casa para que Ángel conociera a sus amigos.
Llegó la primera cena en casa de Invadidos y se planeó para eso un menú bastante fuera de lo común: codornices, erizo traído de Baja California, postres franceses que preparó un chef exclusivamente para el evento. La cena al final resultó lo de menos, lo más importante fue la cantidad de vino que se dispuso, aun sabiendo Aparición que Ángel por órden del médico no debía tomar alcohol. Lucha enfureció y confrontó a su padre y hermanos pidiéndoles que hubiera límites en ese tema, pero no le hicieron mucho caso, hacía mucho que en su casa no se realizaba un evento así.
El resultado era el esprado por Aparición, que Ángel perdiera la compostura para el día siguiente tener una razón suficiente para un reclamo y por ende poder manipularlo por la culpa. A partir de ese día ella tomó el control total de la familia y Ángel se sometió a todos sus deseos que fueron muchos y muy caros.